Pulsa «Intro» para saltar al contenido

El reto industrial: seguridad en sus instalaciones eléctricas

Si hay algo que mueve la industria es, precisamente, la conexión a la red eléctrica. Un problema con ello puede paralizar una planta de producción, cerrar un turno o incluso provocar un incendio. De ahí que sea necesario prestar periódicamente atentamente su mantenimiento y realizar tantas mejoras como sean necesarias.

Cuáles son los verdaderos pilares del reto

  1. Cumplimiento de normas y regulaciones: Es fundamental cumplir con todas las normas y regulaciones eléctricas vigentes ya que son, en realidad, las que establecen estándares de seguridad y especificaciones técnicas.
  2. Diseño adecuado a la industria: El diseño de las instalaciones eléctricas industriales debe ser realizado por profesionales capacitados y experimentados como insisten desde empresas como Electro Andreu, que han tenido que arreglar algunas instalaciones por no cumplir los mínimos para dar servicio a las fábricas. Tener en cuenta la carga eléctrica, la distribución de energía, la ubicación de los paneles de control, los sistemas de puesta a tierra, y apostar, a día de hoy, por la instalación de placas que permitan amortizar una parte de la factura son solo ideas a tener en cuenta.
  3. Mantenimiento regular: Realizar un mantenimiento periódico de todas las instalaciones eléctricas, incluyendo inspecciones visuales, pruebas de funcionamiento y verificación de la de los componentes forma parte de los protocolos preventivos que advierten de cualquier incidencia que haya que resolver a tiempo.
  4. Uno de los consejos más habituales por parte de profesionales es el realizar una correcta identificación y etiquetado de los equipos eléctricos, cables y conductores. Conseguir que los paneles de control, interruptores, fusibles y demás componentes estén claramente señalados evita confusiones y facilita el mantenimiento y la respuesta a emergencias.
  5. Protección contra sobrecargas y cortocircuitos: es imprescindible la instalación de dispositivos de protección adecuados, como interruptores de circuito y fusibles, para proteger contra sobrecargas y cortocircuitos.
  6. Acceso restringido y señalización en áreas específicas donde sólo deberían entrar quienes son considerados personal autorizado.