A menudo nos preguntamos diariamente, cómo podemos ahorrar más. Aquí hay cinco pasos simples que resumen consejos prácticos para ayudarlo a ahorrar de manera óptima y establecer un plan coherente y si quieres un plan más natural y sostenible considera la opción de comenzar un negocio de semillas autoflorecientes de marihuana online, ya que está muy de moda por ser una alternativa mucho más accesible y conveniente.
Define tus objetivos de ahorro, según sus horizontes
Identifica tus objetivos de ahorro clasificándolos por duración. Primer consejo práctico: tengamos claro los motivos por los que estás ahorrando o quieres empezar a ahorrar. Puede ir desde comprar un apartamento hasta viajar a las islas canarias el próximo verano, pasando por ese hermoso windsurf con el que quieres darte un capricho y el premio mayor que quieres acumular para tus hijos. Es perfectamente normal querer ahorrar con varios objetivos en mente, más o menos a largo plazo. Hacer un presupuesto para el viaje soñado del próximo verano es probablemente un objetivo a más corto plazo que comprar su casa, para lo cual es posible que tenga que ahorrar dinero y ahorrar durante varios años.
Distinguir entre objetivos de ahorro a corto, mediano y largo plazo
El secreto está en identificar claramente tus objetivos y cuantificarlos. Luego, este ejercicio le brinda la oportunidad de clasificar sus objetivos de ahorro en tres canastas distintas: proyectos de corto plazo 3 meses a 2 años, proyectos a mediano plazo 2 años a 10 años objetivos a largo plazo de 10 años o más, normalmente financiando los estudios de los hijos o preparándose para la jubilación. Último paso, prioriza estos objetivos financieros según su importancia para ti, entendiendo que generalmente es imposible alcanzarlos todos rápidamente y al mismo tiempo a menos que te toque la lotería, obviamente. La clave es saber en qué orden quieres hacerlo.
Calcula tu capacidad de ahorro
Ahora que sabes para qué estás ahorrando, se trata de identificar cuánto dinero puedes ahorrar cada mes. Se trata de analizar tus finanzas personales e identificar tu presupuesto, comparando tus ingresos con tus gastos. Normalmente, este cálculo se realiza mensualmente, ya que en la gran mayoría de los casos nuestros ingresos son salario, asignaciones diversas, etc. Los recibimos todos los meses. Tenga en cuenta que en nuestros cálculos también será necesario tener en cuenta todos los ingresos en efectivo, incluidos los ingresos menos frecuentes, normalmente anuales, como por ejemplo los dividendos sobre acciones, las bonificaciones anuales o incluso los intereses pagados en cuentas bancarias.
Del mismo modo, a la hora de calcular nuestros gastos no debemos olvidarnos de los gastos anuales, como el impuesto de vivienda o incluso la compra de regalos navideños. En definitiva, anota todos tus ingresos, por un lado, y todos tus gastos por el otro, sin olvidar las suscripciones mensuales que se descuentan automáticamente de tu cuenta bancaria. Este ejercicio de presupuesto también puede permitirte identificar gastos innecesarios y eliminar ciertas suscripciones mensuales a servicios que ya no utilizas. Restando tus gastos a tus ingresos, obtienes lo que llamamos tu capacidad de ahorro. Esta es la cantidad de dinero que puedes invertir cada mes.
La regla 50/30/20
No existen fórmulas precisas sobre el tema, y evidentemente, cuantos mayores sean tus ingresos, mayor será la cantidad que podrás ahorrar. Pero para que te hagas una idea, muchos economistas recomiendan seguir la regla 50/30/20, donde: Tus gastos esenciales comida, alquiler, calefacción, electricidad, ropa, etc. no deben exceder el 50% de tus ingresos; tus compras de placer, salidas, vacaciones, viajes, actividades deportivas, suscripción a Netflix, etc. no representan más del 30% de tus ingresos; Esto te deja la posibilidad de ahorrar al menos el 20% de tus ingresos mensuales, para poder dedicar este dinero a inversiones. Cualquiera que sea su monto de ahorro mensual objetivo, es natural abordarlo con un poco de flexibilidad. Pero es importante compensar un mes en el que los gastos se han desbordado, con uno o más meses de gastos más limitados, para respetar tu objetivo de ahorro anual.
Paso intermedio, aumente sus ahorros preventivos
Acumular ahorros preventivos no es uno de los cinco pasos para ahorrar con éxito. Este es un paso intermedio antes de ponerse manos a la obra. De hecho, ahora que tiene una idea precisa de sus planes de ahorro y de la cantidad de dinero que puede ahorrar para lograrlos, todavía necesita, inicialmente, protegerse del golpe inesperado y duro. Para eso está el ahorro preventivo que, como su nombre indica, tiene como objetivo ayudarte a afrontar una sorpresa desagradable, como un frigorífico que se estropea, un coche que requiere reparaciones o incluso gastos médicos inesperados. Los especialistas financieros estiman que el importe debería rondar entre 3 y 6 meses de salario, sobre todo dependiendo de su situación familiar. Para una sola persona, un ahorro preventivo que represente tres meses de salario debería ser suficiente, mientras que una persona a cargo de una casa familiar sin duda deberá crear una red de seguridad un poco más gruesa.
Este dinero debe estar siempre disponible y ser invertido sin riesgo.
