Los negocios online no es que hayan llegado para quedarse, es que ya son una de las opciones más elegidas tanto por los nuevos emprendedores como por los clientes. En ambos casos han conseguido un entorno perfecto para ambos.
Por un lado, quienes optan por crear un negocio online, tienen una serie de gastos más bajos al necesitar menos infraestructura que si se abriera un local a pie de calle y, por el lado del cliente, tiene una accesibilidad al servicio o producto desde cualquier sitio y a cualquier hora.
La rentabilidad, por tanto, es mucho más sencilla de obtener siempre y cuando previamente se haya hecho una buena estrategia digital.
«Muchos piensan que con abrir una web estaría hecho el trabajo y nada más lejos de la realidad. Pese a que online hay cosas mucho más simples porque, por ejemplo, no se necesitan licencias de obras para habilitar oficinas o de apertura, lo cierto es que hay que tener en cuenta muchas variables para que un negocio funcione y pueda tener futuro» explican desde Ecommerce Efectivo.
¿Cuáles son esos puntos a tener en cuenta?
Aspectos como la estrategia es básico si quiere sacarse partido al esfuerzo. No es lo mismo habilitar una web responsive que una que tarda en cargar. No es lo mismo planificar una estrategia de comunicación y marketing que posicione la web que no hacer nada y esperar a que llegue el maná.
Es necesario tener claro cuál es el escenario del que se parte y cuál el objetivo para ir creando la imagen de marca a través de ello de forma que, gracias a una planificación, se puedan ir ampliando no solo los servicios de la web (atención al cliente, dudas, etc) sino también los canales de venta (desde la web, a través de plataformas como Amazon, etc.).
La creación de tiendas online conlleva también conocer a fondo cuál es el ecosistema de pago más eficaz para que se pueda formalizar la transacción, de forma segura, a través de la propia web. «Aunque muchos piensan que basta con lanzarse a la creación de la tienda online, existe una normativa y regulación a la que hay que prestar atención para evitar problemas y multas. No se trata de correr sino de hacer una estrategia certera que responda a las necesidades pero desde el conocimiento de cómo hacerlo para evitar sustos y problemas» explican.
Ya está todo pensado, ¿dónde se guarda la mercancía para enviar?
Esta es una de las grandes preguntas cuando la operativa ya está a punto de lanzarse. Es necesario tener un pequeño stock de lo que se va a vender para poder darle salida rápido.
En primer lugar, buscar un espacio de almacenaje es cada vez más fácil gracias a los trasteros en auge. La ventaja de poder recoger en ellos la mercancía y poder ir haciendo un pequeño stock para darle salida rápido es vital.
También tener algún tipo de acuerdo con empresas de transporte para las recogidas y entregas puede ser clave para ganar no solo tiempo sino agilidad a la hora de tramitar los pedidos que puedan ir llegando.
La clave, por tanto, está en la estrategia. Cuanto más clara, más facilidad que sea rentable.