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Scope Ratings ve «poco realista» el temor de que Telefónica acabe bajo control del Gobierno saudí

MADRID, 07 (SERVIMEDIA)

La hipótesis de que el Gobierno saudí acabe tomando el control de Telefónica es «poco realista», según informe sobre la entrada accionarial del grupo STC en la multinacional española que ha publicado la agencia de calificación crediticia Scope Ratings, en el que asegura que esta operación no solo es «delicada» desde el punto de vista político, sino que tiene pocos visos de reportar beneficios a la corporación saudí, a la vista de la experiencia reciente de las principales inversiones transfronterizas en operadores europeos de telecomunicaciones.

«En un sector europeo de las telecomunicaciones aún dominado por antiguos monopolios nacionales como BT, Deutsche Telekom, Orange y Telecom Italia, la nacionalidad sigue siendo importante, por lo que la inversión de Saudi Telecom en Telefónica plantea muchas dudas», señala la analista.

A su juicio, los operadores nacionales europeos siguen siendo activos estratégicos para los gobiernos, y por eso puede resultar difícil aceptar la influencia extranjera sobre ellos, «por no decir el control, incluso cuando el Estado ya no es accionista, como ocurre en el caso de Telefónica».

«En los últimos años, ha cobrado cada vez más relevancia la importancia de garantizar el control político nacional sobre la infraestructura de telecomunicaciones, partiendo de las revelaciones de espionaje del denunciante de la NSA Edward Snowden hasta la conmoción económica que supuso la pandemia del virus Covid, que llevó a generalizar el trabajo a distancia», agrega Scope.

Además, la agencia de calificación subraya que una inversión de este tipo no solo resulta políticamente delicada, sino que la historia «ha demostrado que los beneficios de las inversiones transfronterizas en el sector de las telecomunicaciones son difíciles de obtener, si no imposibles, sobre todo en una industria tan madura como la europea».

Recuerda operaciones recientes realizadas sin éxito por gigantes del continente como Deustche Telekom, Orange o Vodafone.

«Estas dificultades, junto con las limitadísimas posibilidades de consolidación de la telefonía móvil nacional por motivos regulatorios, nos hacen pensar que el riesgo de fusiones y adquisiciones sigue siendo limitado en Europa desde el punto de vista crediticio, incluso a medida que los nuevos inversores buscan diversificación fuera de sus mercados de origen», concluye el informe.