DPA – Si los niños son muy activos y corren mucho, esto resulta beneficioso para su corazón e influye en la flexibilidad de los vasos sanguíneos. Y, por el contrario, puede tener consecuencias negativas para la salud cuando el menor se mueve poco o nada.
Hacer mucho ejercicio físico desde una edad temprana reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares a largo plazo. Es importante que los niños se muevan mucho y hagan deportes.
«Las actividades deportivas mejoran la capacidad de los vasos de contraerse y dilatarse», explica el cardiólogo infantil Hermann Josef Kahl desde Alemania.
Y, según puntualiza, cada paso que den es importante. Incluso si el niño que hasta entonces apenas realizaba ejercicio comienza con actividades leves, ya esto tiene efectos positivos sobre la salud, comenta el experto de la Asociación de Médicos Pediatras y de Adolescentes de Alemania (BVKJ, por sus siglas en alemán)
Por ejemplo, con deportes y actividad se puede prevenir una arterioesclerosis, que es considerada un factor de riesgo para la salud cardíaca.
Según indica la asociación, la arterioesclerosis fue observada por estudios ya durante la infancia, sobre todo en conexión con sobrepeso, hipertensión arterial y valores elevados de grasa en sangre.
«Los menos piensan en la salud de los vasos sanguíneos en los niños», indica Kahl. Pero esta, recalca el profesional, puede verse influida de manera positiva o negativa ya durante la infancia.