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Descubre los diferentes tipos de encuadernación para tus libros

De acuerdo con lo contenido en el último informe sobre Hábitos de Lectura y Compra de Libros en España publicado por la Federación de Gremios de Editores de España, durante el pasado año 2021 el porcentaje de personas que leía libros en su tiempo libre creció ligeramente, situándose en un 64,4%, frente al 64% de lectores que había en 2020.

Del informe también se extraen otro tipo de datos como que las mujeres leen más que los hombres, que los lectores cubren una franja de edad que va desde los 14 a los 64 años, que el libro en formato papel sigue siendo la opción preferida por los españoles y que casi la mitad de los libros se compran en librerías. A destacar que por primera vez descendió el porcentaje de lectores de libros en soporte digital y que se produjo un notable incremento de usuarios de audiolibros.

Asimismo, y según los últimos datos estadísticos de la Federación de Gremios de Editores de España, solo en 2019 se concedieron un total de 90.073 ISBNs, una cifra que coincide con la producción editorial en nuestro país. Durante el 2019 se editaron en nuestro país 229.515.000 ejemplares, mientras que el número de ejemplares vendidos fue de 162.220.000, siendo la tirada media de ejemplares por título de 3.779.

Y es que, además de lectores por ocio, en nuestro país abundan los escritores, de ahí el elevado número de ISBNs concedidos. Sin embargo, pocos son los que logran que su pequeña creación sea editada por una de las grandes editoriales del país, viéndose obligados, en un elevado porcentaje de casos, a decantarse por la autoedición, y siendo ahí donde se abre un amplio abanico de posibilidades.

Acudir a una imprenta tradicional o imprimir online, elegir el formato, si se quiere tapa dura o blanda, si se prefiere encolado o cosido, y un sinfín de cuestiones más que llegarán tras la revisión y la maquetación del libro. Y es que, escribir el libro es solo el primer paso de los muchos que habrá que dar hasta lograr tenerlo físicamente en nuestras manos.

De hecho, una de las primeras y difíciles cuestiones a las que habrá que enfrentarse será elegir el tipo de encuadernación. Y es que, pese a que por las manos de los apasionados lectores y escritores pasan todo tipo de encuadernaciones, lo cierto es que pocos conocen las diferencias entre ellas y cuales son más apropiadas para cada libro. ¡Arrojemos un poco de luz al respecto!

La encuadernación en tapa dura cosida es la preferida para los libros de prestigio y también para los cuentos infantiles. Si lo que se busca es una encuadernación que proporcione gran durabilidad y un elevado aspecto de calidad, la mejor opción es imprimir libro tapa dura. Por supuesto este tipo de encuadernación tiene sus pequeñas desventajas, y es que, hace que los libros sean más pesados y, además, el coste de este tipo de impresión suele ser más elevado.

Si lo que se busca a la hora de imprimir libros es una encuadernación más asequible, lo usual es decantarse por la rústica, que a la vez presenta dos variantes, la encolada y la cosida. Sus principales diferencias son que mientras que la rústica encolada presentará una apertura limitada, la cosida es muy maleable, estable y duradera, además de tener un mayor aspecto de calidad, lo que hace que esta última tenga un coste superior, pero inferior a la encuadernación en tapa dura.

En cualquier caso, y para evitar que el producto final difiera de lo deseado, lo ideal es acudir a una imprenta que cuente con una dilatada experiencia en edición de libros y que ofrezca asesoramiento personalizado a todos aquellos escritores noveles a los que el proceso de edición, maquetado y encuadernación pueda resultarles tedioso.