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El desconfinamiento también llega a la relación de pareja

Mucho se ha hablado durante estos meses del desconfinamiento perimetral, de las medidas sanitarias, de las consecuencias en la salud mental…pero poco se ha hablado de las relaciones de pareja.

Más allá de compartir cada vez más tiempo en casa, las épocas de incertidumbre suelen pasar factura a las parejas por la inapetencia, la desidia y la dejadez. Esto, que lleva alargándose en el tiempo más de un año, ha llevado a replantearse a muchas parejas el necesitar de alicientes para recuperar una relación sana, divertida y por la que seguir apostando día a día.

Pero, ¿cómo hacer esto? En realidad existen dos opciones o vías por las que empezar el camino.

El primero de ellos pasa por ser sincero y por tener ganas de volver a conectar a muchos niveles de verdad con la otra parte. Es el primer punto a aclarar. ¿Tiene remedio si se pone de parte de cada uno o se da por imposible la remontada?

Si la respuesta es sí, es hora de apostar por innovar y por introducir juguetes, geles y un poco de imaginación. Aunque aún hoy suele costar moverse e ir a una tienda erótica, gracias a la opción de compra en un sexshop online.

Gracias a la discreción de envíos se puede disfrutar, en la intimidad de casa, de la recepción de cajas en las que el límite lo pone la propia pareja. Objetos de fetiche, geles lubricantes, juguetes sexuales… todo vale para incitar de nuevo ese clima de intimidad y juego que une a las parejas.

El segundo pasa por echar un vistazo a la relación y, si se es incapaz de conseguir avanzar, acudir a un especialista que pueda poner una hoja de ruta a la pareja para que vuelvan a encontrar todo lo que en un momento dado les unió. La complicidad, el cariño, el morbo, la confianza, el apego y de nuevo la conexión sexual pueden trabajarse para volver a incentivarse.

El límite está en que ambos estén de acuerdo en pelear por superar un bache. Pero también por el realismo, porque a veces se puede dar por concluido el amor, y aún así fomentar otro tipo de relación cordial. Eso sí, cada parte se quedará con sus propios juguetes.