Reino Unido o Estados Unidos son solo dos de los países que cada vez están demandando más trabajadores venidos de fuera para cubrir las vacantes que se quedan sin cubrir. Pero no son los únicos. Cada vez son más las empresas europeas, sobre todo del norte de Europa, que apuestan por abrir la puerta a contratos con personal capacitado para darles ciertos servicios, con Alemania a la cabeza.
Pese al parón internacional a nivel laboral que supuso la pandemia, la recuperación creciente de la mayoría de países hacen que se necesite personal cualificado y, es por ello, que las empresas españolas están apostando por invertir en formación.
“En nuestro país hay una vía que está comenzando cada vez más a ser explorada por las empresas. El formar en idiomas a sus trabajadores vía cursos bonificados, por ejemplo, les está abriendo muchas puertas para la demanda de servicios que hay a nivel internacional. El crecimiento que estamos experimentando en cursos y también en solicitud de información es cada mes exponencial. Hay una oportunidad única para las pymes siempre que apuesten por la formación” explican desde Dictum Idiomas, una empresa experta en gestionar todos los trámites de Fundae para que las compañías puedan acogerse a un tipo de formación bonificada que beneficia a trabajadores, pero también a ellas por el coste nulo.
Capacitar al personal, la clave del crecimiento en los próximos años
Si algo ha quedado claro es la necesidad de adaptarse a las nuevas tendencias. Hoy en día hay una serie de competencias que se están siendo demandadas no solo en los mercados nacionales sino, sobre todo internacionales.
Y para llegar a ellos, lo primero que se necesita es que exista un personal dentro de la compañía capaz de asumir dichas disciplinas, partiendo de idiomas nativos de las empresas que demandan el servicio. Inglés, francés, alemán o incluso algunos más nuevos como chino o árabe están siendo claves para la expansión de negocio a nivel internacional.
“En España las empresas tienen un crédito para formar a los empleados. Sin embargo, en la mayoría de los casos, desconocen su alcance. Gracias a este tipo de sistema gestionamos muchos cursos, tanto de idiomas como de cualquier otra actividad – tecnología, marketing, ventas, etc.- que aportan conocimiento a sus trabajadores y una mayor calidad dentro de la corporación. Este tipo de crédito no es acumulativo, con lo que, sin usarlo, realmente se pierde” explican.