Hay varios motivos por los que un banco puede quebrar. Algunos de los más comunes son:
- Préstamos incobrables: si un banco presta demasiado dinero a personas o empresas que no pueden pagarlo, puede acumular una gran cantidad de préstamos incobrables, lo que puede poner en riesgo la solvencia del banco.
- Inversiones fallidas: si un banco invierte en activos de alto riesgo que no generan los rendimientos esperados, puede incurrir en grandes pérdidas financieras, lo que puede afectar su capacidad para cumplir con sus obligaciones.
- Falta de liquidez: si un banco no tiene suficiente efectivo disponible para cubrir sus obligaciones inmediatas, como retiros de depósitos o pagos a proveedores, puede enfrentar graves dificultades financieras.
- Mala gestión: si un banco tiene una mala gestión, puede incurrir en costos innecesarios o tomar decisiones que afecten negativamente su rentabilidad y solvencia.
- Crisis económicas: si un banco opera en un entorno económico difícil, puede enfrentar un aumento en los incumplimientos de préstamos y una disminución en los ingresos, lo que puede poner en riesgo su solvencia.
Cabe mencionar que la supervisión y regulación de los bancos por parte de los gobiernos y los organismos internacionales es fundamental para prevenir la quiebra de los bancos y para proteger a los depositantes y al sistema financiero en su conjunto.
Las quiebras de bancos más sonadas a nivel internacional
A lo largo de la historia, ha habido varias quiebras bancarias sonadas a nivel internacional. Algunas de las más notables incluyen:
- Lehman Brothers: en septiembre de 2008, la firma de inversiones estadounidense Lehman Brothers se declaró en quiebra, lo que desencadenó la crisis financiera global de ese año.
- Banco Norte de Rock: en 2007, el banco británico Norte de Rock se declaró en quiebra debido a su exposición al mercado hipotecario de alto riesgo de EE. UU., lo que llevó a su nacionalización por parte del gobierno británico.
- Banco Popular de España: en 2017, el Banco Popular de España se declaró en quiebra después de que el Banco Central Europeo determinara que su valor contable era negativo. Fue adquirido por el Banco Santander por un euro.
- Banco Nacional de Dinamarca: en 1813, el Banco Nacional de Dinamarca quebró debido a la guerra entre Dinamarca y el Reino Unido. Fue una de las primeras quiebras bancarias documentadas en la historia moderna.
- Banco de Japón: en 1995, el Banco de Japón sufrió una crisis de liquidez que llevó a la quiebra de varias instituciones financieras japonesas y contribuyó al prolongado estancamiento económico de Japón conocido como la «década perdida».
- Credit Suisse: en 2023 se ha visto con problemas de liquidez y tras la inyección de más de 40.000 millones de euros fué absorbido por UBS.
Cabe destacar que estas son solo algunas de las quiebras bancarias más conocidas a nivel internacional, y que ha habido muchas otras a lo largo de la historia.
Credit Suisse, la historia del banco protagonista en 2023
Credit Suisse es uno de los bancos más grandes y antiguos de Suiza. Fue fundado en 1856 por Alfred Escher, un empresario y político suizo. En sus primeros años, el banco se enfocó en el financiamiento de proyectos de infraestructura, como ferrocarriles y telégrafos.
Durante la Primera Guerra Mundial, Credit Suisse se convirtió en uno de los principales bancos de guerra, proporcionando financiamiento y servicios bancarios a los países beligerantes. Durante la década de 1920, el banco amplió su presencia internacional, abriendo sucursales en Nueva York, Londres, París y Berlín.
Durante la Segunda Guerra Mundial, Credit Suisse se vio envuelto en controversias relacionadas con el financiamiento de la Alemania nazi. El banco también jugó un papel en la recuperación económica de Europa después de la guerra, proporcionando financiamiento y asistencia técnica para la reconstrucción de infraestructuras.
En las décadas de 1970 y 1980, Credit Suisse se expandió a nivel global a través de adquisiciones y fusiones. En 1997, se fusionó con el Banco de Winterthur para formar el Credit Suisse Group. A partir de la década de 2000, el banco se enfocó en la banca de inversión y gestión de patrimonio, y también estableció una presencia importante en el mercado de administración de activos.
En los últimos años, Credit Suisse ha enfrentado algunos desafíos. En 2015, se enfrentó a una investigación por parte del gobierno de EE. UU. sobre evasión fiscal, y en 2021, sufrió pérdidas significativas debido a la quiebra de Archegos Capital Management y la suspensión de fondos relacionados con el fondo de cobertura Greensill Capital. Finalmente en 2023 tras grandes inyecciones de capital para evitar la quiebra fué absorbido por su gran competidor UBS.