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La formación digital es clave para evitar ciberataques en los centros sanitarios

MADRID, 02 (SERVIMEDIA)

La formación en el ámbito digital es clave para evitar ciberataques en los centros sanitarios, según se puso de manifiesto este jueves en el webinar ‘Amenazas en la Red: los riesgos para el profesional sanitario’ que organizaron el Consejo General de Enfermería (CGE) y su Instituto Superior de Formación Sanitaria (Isfos).

Según informó el CGE, sólo en 2020, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado registraron 287.963 ciberdelitos, tal y como se recoge en el último informe sobre Cibercriminalidad de la Secretaría de Estado de Seguridad, cifras que se incrementan año a año.

De hecho, el presidente del CGE, Florentino Pérez Raya, subrayó que «la tecnología, a día de hoy, está muy presente en nuestras vidas, a todos los niveles, en nuestra vida personal y también en la laboral». «Es muy habitual el uso de teléfonos, ordenadores, redes sociales y de distintas aplicaciones y programas que empleamos en hospitales y consultas, por lo que hay que saber utilizarlos de forma segura», comentó.

Por su parte, la vicepresidenta del Consejo General de Enfermería y directora de Isfos, Pilar Fernández, subrayó que «el evitar ser víctimas de uno de estos delitos, mucho más frecuentes de lo que podemos pensar, está en nuestras manos, primero conociendo de qué hablamos y después sabiendo cómo debemos protegernos para evitar que nos roben nuestros datos e incluso nuestra identidad».

PRINCIPALES RIESGOS

Como explicó el responsable de Ciberseguridad para Empresas del Incibe, Marco Lozano, «compartir las contraseñas entre compañeros puede dar acceso a servicios o datos para los que esa persona no tiene permisos». «Además, muchas organizaciones de ámbito sanitario tienen sistemas obsoletos, desactualizados, equipos que están ya sin soporte por parte del fabricante, una situación que provoca vulnerabilidad de esas organizaciones que pueden ser susceptibles de acceder a las extorsiones, pagos y demás peticiones relacionadas con cualquier tipo de ataque que llevan a cabo los ciberdelincuentes», argumentó.

Existen múltiples posibilidades de que un enfermero pueda poner en riesgo la organización si no lleva a cabo las conductas adecuadas de utilización de servicios. Para evitarlo cualquier profesional, debería tener una mínima formación para utilizar ordenadores y cualquier otro tipo de tecnología de carácter digital, de modo que adquieran los conocimientos mínimos que le permitan ser capaz de identificar algún tipo de amenaza que llega a través del correo electrónico, por ejemplo, pues suele ser el canal más habitual que utilizan los atacantes.

«Se debe evitar visitar páginas de internet de dudosa reputación o que no se sepa que son seguras y no acceder a servicios para los que no se está autorizado, no instalar aplicaciones para las que no tiene autorización, así como limitar la mayor cantidad de exposición de información, tanto privada como profesional», destacó el experto del Incibe.

Así, recordó que el Incibe tiene a disposición de todos los profesionales una línea de ayuda a la seguridad a través del número de marcación corta, el 017, donde cualquier autónomo o empleado puede ponerse en contacto con el Departamento Especializado de Protección a Empresas, donde técnicos altamente cualificados, le darán respuesta a cualquier duda o problema relacionado con la ciberseguridad. Se trata de una línea completamente gratuita y confidencial que está disponible los 365 días del año.