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Viviendas accesibles: el nuevo reto de la segunda mano

El mercado inmobiliario está en constante cambio. Frente a la época en la que era vital ser propietario, se abrió tras la crisis una época en la que el alquiler era la mejor opción para adaptar la vivienda a las necesidades económicas y de zona de cada momento.

Sin embargo, parte de la cultura de nuestro país, sigue volviendo a la propiedad. Y muchas ofertas y buenas oportunidades han venido de la parte de la venta de segunda mano.

Lo primero que hay que conocer, siempre, en obra nueva o segunda mano, es el estado del inmueble a nivel propiedad y también en su interior.

Solo de esta manera se puede plantear, si hiciera falta, una reforma que haga que la casa que fue hogar de otras personas, acabe siendo el de una nueva familia o inquilino.

Para ello hay que contar con la ayuda de expertos que sean capaces de plasmar sobre plano exactamente cómo se quiere y, también, que conozcan las oportunidades y subvenciones para realizar las obras y convertirla en una vivienda accesible.

«Aunque al principio mucha gente no entiende la importancia de esto, a nivel comunitario y también en la vivienda individual es interesante ir revisando las opciones y subvenciones de las distintas administraciones para que tanto fincas como viviendas acaben siendo accesibles. Con el paso de los años, las demandas y necesidades cambian. No hace falta hablar de accidentes sino simplemente de cumplir años y de necesidades que aseguren la movilidad en cualquier circunstancia dentro del edificio y de la vivienda. Desde 2011, solo un 2% de los edificios nuevos se consideran universalmente accesibles y es el momento de cambiar la tendencia» explican algunos expertos en la materia.

Anchura de puertas, elevadores, salvaescaleras o rampas son solo algunos de los elementos que benefician no solo a personas con movilidad reducida sino también a vecinos que, siendo mayores de 75 años, pueden necesitar asistencia sin ser discapacitados.

La ventaja de este tipo de proyectos es que, como comunidad de propietarios, se pueden solicitar ayudas que pueden llegar a cubrir hasta un 50% del presupuesto de obra si no sobrepasa los 20.000 euros o incluso préstamos a 0% de interés de hasta 100.000 si las reformas necesarias son mayores.

Es el momento de apostar por pensar en el futuro. Es el momento de diseñar edificios accesibles y de reconvertir los que no lo son.