MADRID, 18 (SERVIMEDIA)
El 73,6% de los productos que conforman el Índice de Precios de Consumo (IPC) experimentó en noviembre una subida de precio superior a la variación salarial pactada en convenio en ese mismo mes.
Así se desprende de los datos del IPC del mes de noviembre confirmados esta semana por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y consultados por Servimedia.
En concreto, en los productos agrupados en subclases, el mayor nivel de desagregación del IPC, se contabilizan 199 productos, de los cuáles dos de ellos no ofrecen dato para el mes de noviembre.
Considerando los 197 restantes que sí presentan variación, 145 registraron una subida de su precio por encima del 2,69%, que fue la variación salarial pactada en los convenios colectivos registrados hasta noviembre por el Ministerio de Trabajo y Economía Social.
Cabe recordar que el IPC subió el mes pasado un 6,8% en tasa anual, moderando su tendencia al alza respecto a octubre, cuando repuntó un 7,3%.
Entre los productos que subieron por encima de los salarios se encuentran el café, el pescado, la carne, el pan, el arroz, las patatas, los huevos, la leche, los automóviles nuevos y de segunda mano, los restaurantes, los museos y los cines, entre otros muchos. El que más vio encarecerse su precio de los 197 productos analizados por el INE fue la categoría de ‘otros aceites comestibles’, que no engloba el de oliva, con un coste un 55,9% mayor que hace un año.
Si se tiene en cuenta la variación salarial pactada solo de los convenios firmados en 2022, que fue del 3,03%, la cesta que subió por encima de ese nivel pasa a reducirse hasta el 68,5%.
En comparación con el mes de octubre, se mantiene el mismo número de productos que incrementaron su precio entonces por encima de la subida salarial pactada de octubre (del 2,64%) y se reduce en tres productos en el caso de tener en cuenta la mejora salarial firmada solo en este año, que fue del 2,9% hasta octubre.
Por otra parte, el 50,3% de la cesta del IPC se encareció más de un 6% en noviembre, barrera que es considerada por algunos analistas como la que determina que hay efectos de segunda ronda, es decir, que el repunte de la inflación provoca a su vez una subida de los salarios para evitar la pérdida de poder adquisitivo.
En octubre, ese porcentaje fue muy parecido, dado que solo se contabilizó un producto menos que en noviembre en el paquete que mostró un encarecimiento por encima del 6%.
