MADRID, 18 (SERVIMEDIA)
Cepesca y la Federación Nacional de Cofradías de Pescadores (FNCP) pidieron este viernes al Gobierno que tome medidas «urgentemente» para revertir la «situación de inviabilidad de su actividad» como consecuencia del alza de los costes de explotación derivado del incremento del precio de la energía entre las que destacan ayudas al gasoil similares a las de Francia y la exoneración temporal de las cotizaciones a la Seguridad Social.
Así lo indicaron las patronales pesqueras en un comunicado en el que reclaman que se alivie «de manera práctica y rápida» la situación tras analizar la reunión mantenida con la secretaria general de Pesca del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, Alicia Villauriz.
Según los pescadores, el Gobierno propuso la puesta en marcha de «medidas de compensación ante perturbaciones significativas de los mercados» contempladas en el artículo 26 del FEMPA (Fondo Europeo Marítimo de Pesca y de Acuicultura) para el período 2021-2027. No obstante, aunque consideran las medidas «acertadas», creen que son «inútiles a corto plazo». «Su tramitación europea y su posterior trasposición a la legislación española, no las haría efectivas antes de finales de este año», apunta el sector.
Por ello, entre las medidas que demandan ponen como ejemplo las adaptadas por Francia, que anunció ayer «ayudas de 35 céntimos por litro al sector pesquero hasta el 31 de julio». Además, piden el uso de las ayudas de minimis o rebajas de las tarifas portuarias.
Los pescadores insistieron que en la próxima reunión con el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, que todavía no tiene fecha, pueda abordarse «de manera decidida» la puesta en marcha de «este tipo de soluciones», ya que, recuerdan, el precio del gasoil pesquero «se ha duplicado» y el coste representa «más del 50% los totales de la actividad pesquera».
Asimismo, las patronales pesqueras alertaron de que el paro de los transportistas está provocando «gravísimos perjuicios» al sector, tanto de altura como de bajura y provocando la «pérdida de ciento de toneladas de pescado en el primer caso y el amarre de numerosas flotas en el caso de la bajura, ante la imposibilidad de comercializar sus capturas».
