Cuando se piensa en comprar un portátil para trabajar, para jugar o para el uso diario en casa, la mayor parte de las veces se comienza con una pregunta similar. Lo ideal es buscar siempre lo último y lo más innovador, porque garantizará mayor vida útil, aunque lograrlo sin gastar mucho dinero y sin cometer errores es algo que requiere tacto y análisis.
Es un aparato tecnológico con una vida útil y una utilidad muy largas, por eso, al consultar sobre qué ordenador portátil comprar se deben plantear muchas cuestiones, de manera que la elección no esté marcada por lo más barato posible, sino porque la comparación entre la calidad percibida y el precio a pagar siempre sea favorable para el lado del usuario.
Hacerlo es tan sencillo como determinar las variables más influyentes en la calidad o el rendimiento del equipo, y a partir de ahí, trazarse límites mínimos y máximos, tanto en las especificaciones como en el presupuesto.
La influencia de las marcas y líneas
Al buscar esos ordenadores que lideran el mercado en la actualidad, rara vez habrá espacio para marcas noveles o emergentes, si no que en la mayoría de las ocasiones se tratará de marcas y líneas ya consolidadas.
Y es que, si algo tienen los mejores portátiles calidad precio, es una tradición de calidad y confianza ganada a través de los años, porque al final los mejores portátiles calidad-precio son los más vendidos dentro de un rango de calidad vista como favorable por parte de los clientes.
Por esa razón, si se quiere apostar por la innovación, pero también por las garantías de que todo funcionará correctamente, optar por las marcas consolidadas y sus líneas icónicas puede llegar a ser lo más sensato que pueda hacerse.
Procesador y memoria RAM, un binomio indivisible
Salvo que se compre un ordenador portátil para situaciones muy específicas -como para jugar, donde la tecnología de la pantalla o del teclado será influyente-, lo más importante a la hora de valorar la calidad y el rendimiento de un portátil será el procesador y la memoria RAM, un binomio que si se combina bien, se pueden obtener muchas alegrías y satisfacciones.
Si bien algunos procesadores serán prohibitivos para el presupuesto, por su novedad o capacidad, las marcas principales como Intel y AMD, ofrecen líneas y modelos económicos en todas las gamas, por lo que se puede ajustar bastante hasta dar con un modelo que brinde la potencia adecuada.
Luego está el tema de la memoria RAM, donde si bien hay matices, lo normal es apostar por la mayor cantidad posible. Así, una memoria de 8 GB en adelante sería lo lógico y normal, pero si es mayor y el presupuesto lo permite, lo mejor será optar por una memoria incluso mayor.
Apostar por el futuro, pero con mesura
Elegir en base a marcas y especificaciones cruciales es elemental para no fallar en la compra de un nuevo ordenador portátil. Pero dejar de lado las especificaciones innovadoras que realmente no tendrán un aporte sustancial para el rendimiento o la calidad de la experiencia, también.
El mercado de los portátiles se ha renovado enormemente en los últimos años, surgiendo nuevas tecnologías de pantalla, sensores modernos, mejores baterías, y sobre todo, mejores tarjetas gráficas y procesadores. A pesar de ello, no todas las innovaciones son necesarias y algunas seguro que nunca podrán ser aprovechadas en su totalidad.
Por eso, comprar un ordenador portátil que asegure muchos años de rendimiento óptimo es lo esencial, pero también saber interpretar aquellas variables que para su uso serán más importantes, no siendo tan importante una tarjeta gráfica para un periodista, pero sí para un gamer o un diseñador gráfico. De esta manera, la posibilidad de ahorrar, de tomar buenas decisiones y de comprar un portátil que acabe cumpliendo la máxima de superar la calidad al precio pagado por él, serán sumamente mayores.
