MADRID, 07 (SERVIMEDIA)
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) aconsejó este jueves a los consumidores españoles que comprueben si tienen en casa alguno de los huevos Kinder pertenecientes a varios lotes de la marca fabricados en Bélgica y que, de manera preventiva, están siendo retirados a raíz de un brote de Salmonella Typhimurium monofásica detectado en varios países europeos. En caso afirmativo, les instó a devolverlos al punto de venta y, si ya se han consumido, a «prestar atención» a posibles síntomas.
Así lo recomendó en un comunicado en el que recordó que, en la «mayoría» de los chocolates afectados, la fecha de consumo preferente se encuentra entre el 26 de mayo y el 21 de agosto de este año y que su ingesta puede provocar diarrea, vómitos, dolor de cabeza o fiebre.
OCU puntualizó que esta alerta afecta a «diversos» productos de Kinder «muy populares y dirigidos sobre todo al público infantil» y advirtió de que, en concreto, se trata de varios lotes de Kinder Schokobons (formatos de 46, 200, 225 y 500 gramos) con fechas de consumo preferente entre el 26 de mayo y el 21 de agosto de este año, al igual que Kinder Schokobons White (formato de 200 gramos), Kinder Sorpresa Maxi (100 gramos), Kinder Happy Moments (en formatos de 133 y 191 gramos) y Kinder sorpresa huevera de seis unidades edición Navidad (pack de 120 gramos), con fecha de consumo preferente el 20 de abril de este año.
La organización aseveró que el resto de huevos Kinder Sorpresa de cualquier formato, el Kinder Gran Sorpresa y las demás marcas de Kinder «no están afectadas por esta alerta» y reiteró que los productos incluidos en la misma están «implicados» en un brote de salmonelosis que ha afectado a personas de distintos países y que, por esa razón, «se ha procedido a dejar de distribuirlos y a retirar los que estuvieran a la venta».
OCU explicó que la salmonelosis es una toxiinfección «muy común» y que se transmite sobre todo por aguas o alimentos contaminados, si bien consideró que «una mala manipulación o la falta de higiene en el proceso puede estar detrás de un brote de estas características».
Además, subrayó que, tras la ingesta de un producto contaminado, los síntomas pueden tardar uno o dos días en aparecer y que «puede resultar más peligrosa en niños, ancianos o personas con el sistema inmune más debilitado».
La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan), dependiente del Ministerio de Consumo, ya informó este miércoles de que en España se está «recabando información» con el fin de conocer si existe algún caso en el país relacionado con dicho brote.
