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El Gobierno equipara la fiscalidad de todas las confesiones religiosas y las sitúa como la de las ONG

MADRID, 25 (SERVIMEDIA)

El Gobierno cerró acuerdos con todas las confesiones religiosas, igual que hace días con la Iglesia católica, de manera que se equipara el régimen fiscal de todas las confesiones religiosas con arraigo en España, con independencia de si tienen suscrito un acuerdo de colaboración con el Estado o no, según fuentes de la Presidencia.

Estos beneficios fiscales, según dichas fuentes gubernamentales, son los mismos que ya disfrutan las entidades sin ánimo de lucro (ONG, fundaciones, etc.) y las confesiones religiosas con acuerdos de colaboración con el Estado.

Este acuerdo se conoce el día que el ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños, mantiene una reunión con representantes de Ia Iglesia ortodoxa, Testigos de Jehová, Unión Budista de España-Federación de Entidades Budistas de España (UBE-FEBE) e Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, en la sede de su Ministerio, para formalizar dichos acuerdos.

Según explican a Servimedia desde el Ministerio de Bolaños, con este trato «se avanza y garantiza por ley un trato equitativo a todas las confesiones religiosas, y lo hace mediante pactos».

En concreto, el Ministerio, que es el competente en materia de relaciones con las confesiones religiosas, cerró acuerdos con la Iglesia ortodoxa, la Unión Budista, la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (mormones) y los Testigos de Jehová que les «permitirá disfrutar de los mismos beneficios fiscales que tienen reconocidos la Iglesia católica, la Federación de Entidades Religiosas Evangélicas, la Federación de Comunidades Israelitas y la Comisión Islámica».

Este acuerdo, según el Ministerio de la Presidencia, responde a una «demanda histórica» de estas confesiones y de sus fieles y ha sido «fruto del diálogo»; se fundamenta en los artículos 9.2 y 16 de la Constitución, que «obligan a promover las condiciones para hacer real y efectivo el derecho fundamental de libertad religiosa en condiciones de igualdad, corrigiendo una diferencia de trato de difícil justificación».

Y supone, por tanto, según el Ejecutivo «ganar espacio en igualdad y neutralidad frente a las creencias de los ciudadanos, que es el principio que define al Estado aconfesional que somos».

En datos, supone beneficiar a 1,3 millones de fieles en total: 1 millón de ortodoxos; 122.000 testigos de Jehová; 100.000 budistas; y 61.400 mormones.

Así como lo que respecta a los bienes, locales y centros de las propias confesiones.

Recuerdan desde el Gobierno que este es el primer acuerdo amplio alcanzado con la Iglesia ortodoxa, la Unión Budista, la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (mormones) y los Testigos de Jehová desde su reconocimiento como confesiones con notorio arraigo en 2003, 2006, 2007 y 2010, respectivamente.

·Además, supone el tercer acuerdo que alcanza el Ministerio de la Presidencia con las confesiones religiosas en nuestro país.

Después, del primero alcanzado por el Ministerio de la Presidencia con la Iglesia católica en el que se identificaron más de 1.000 inmuebles inmatriculados indebidamente, suscrito el 24 de enero de 2022.

El segundo, también con la Iglesia católica y formalizado el 29 de marzo de 2023, que permitió la equiparación de su régimen fiscal con el que disfrutan las entidades sin ánimo de lucro.

Para Presidencia se trata de «tres avances en equidad muy importantes que corrigen diferencias de trato históricas carentes, en este momento, de motivación».

Con ello, se acaban los privilegios fiscales de la Iglesia católica, que pasa a ser tratada como una confesión religiosa o entidad sin ánimo de lucro más. Y se reconoce el mismo trato a otras confesiones religiosas con notorio arraigo, gracias al acuerdo alcanzado», subrayan desde el Gobierno.