– Alertan del riesgo de estanflación y piden al Gobierno reajustar los presupuestos de 2022 por el cambio de escenario económico
MADRID, 31 (SERVIMEDIA)
El Observatorio Financiero del Consejo General de Economistas (CGE) rebajó este jueves sus previsiones de crecimiento para España en 1,5 puntos, tras la reducción que ya auguró en febrero, de forma que prevé que el Producto Interior Bruto (PIB) avance este año entre un 3,7% y un 3,9%. Además, este organismo alertó del riesgo de «estanflación» por la caída del crecimiento y la elevada inflación.
El CGE atribuye esta rebaja en las previsiones de crecimiento a las consecuencias de la guerra en Ucrania y a la elevada inflación que, según el Instituto Nacional de Estadística (INE) se situó en marzo en el 9,8%, su dato más alto desde 1985. Además, destaca que la inflación subyacente, por su parte, se sitúa en el 3,4%, cuatro décimas más que en febrero.
Aunque la guerra entre Rusia y Ucrania tiene un efecto significativo, no es menos cierto que esta tendencia creciente ya viene observándose desde hace 9 meses, lo que nos hace considerar que se trata de inflación persistente con un gran componente estructural y no coyuntural como se preveía en el pasado año», alerta el CGE.
El alza de precios, en su opinión, puede hacer que se resienta «fuertemente el consumo por la pérdida de poder adquisitivo a causa de la elevada inflación, la presión fiscal y por la contención salarial obligada, para que no se produzca una inflación de segunda ronda, aún más temible, por la espiral salarios-precios que genera».
Los economistas también destacan las consecuencias del paro de transportistas, así como la «incertidumbre» acerca de la duración de la guerra en Ucrania.
TURISMO
Como aspecto positivo, el Observatorio del CGE prevé un buen comportamiento del turismo, tanto en Semana Santa como en verano, «siempre y cuando la situación de la pandemia esté controlada y, por supuesto, la guerra en Ucrania tenga un desenlace próximo». De hecho, señala que España podría considerarse un destino «más seguro» que otras zonas del Mediterráneo.
Ante esta situación, y con la rebaja del crecimiento prevista, el CGE defiende que el Gobierno actualice los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para tratar de adecuar las distintas partidas de ingresos y gastos a la realidad económica. Y es que, como recuerda el CGE, para 2022, el Gobierno ha previsto un incremento de PIB del 7%, con un déficit del 5%.
En cuanto a la política monetaria del Banco Central Europeo, a pesar de las incertidumbres existentes, el CGE indica que no descarta subidas de tipos de interés antes de finalización del año para paliar las tensiones inflacionistas existentes. Además, ya anunció el pasado 10 de marzo su intención de adelantar la retirada de los estímulos con objeto de enfriar el mercado y que la inflación disminuya.
En su opinión, «esto tendrá un efecto en España», ya que «hasta ahora el Banco Central Europeo es su principal comprador, por lo que tendrá que acudir a los mercados de deuda y con seguridad a un precio muy superior».
