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Cae una banda de estafadores de Barcelona que usaba 70 webs para ofertar productos inexistentes

MADRID, 05 (SERVIMEDIA)

La Guardia Civil y los Mossos d’Esquadra ha desarticulado una banda de estafadores de Barcellona que usaba 70 páginas web para ofertar productos, desde videoconsolas a sofás, que nunca llegaban a los compradores.

Según informó el Instituto Armado este martes, en la ‘Operación Tokio-Desla’ han detenido los siete integrantes de este grupo delictivo, al tiempo que se les ha intervenido el material informático que usaban para su actividad delictiva.

Los agentes practicaron ocho entradas y registros -seis en domicilios y dos en locales- en municipios del Vallès Oriental (Barcelona) como Bigues i Riells, La Roca del Vallès, Lliçà d’Amunt y Granollers. En estas intervenciones se localizaron dispositivos electrónicos, ordenadores, diversa documentación, monederos de criptomonedas, varios discos duros y un servidor.

Se calcula que este fraude habría afectado a 4.000 víctimas, cuantificándose en cerca de 2,5 millones de euros los beneficios obtenidos por los acusados.

PAGOS ELEVADOS

Todas las web fraudulentas detectadas han sido intervenidas por la Guardia Civil y los Mossos d’Esquadra, que han incluyeron un mensaje de estas advirtiendo a los internautas de la operación, lo que habría disuadido a unas 1.000 personas de ser estafadas.

Las páginas de Internet contenían ofertas muy atractivas de productos electrónicos y electrodomésticos como televisores, lavadoras y videoconsolas, incluso otros como piscinas portátiles o sofás. Los precios estaban muy por debajo del precio habitual de mercado, con anuncios y descuentos que iban más allá de las rebajas ofertadas habitualmente.

Para dar más rigor a las páginas web, sus creadores efectuaban pagos de considerable importe para posicionarlas en lugares destacados en los buscadores más utilizados. Una vez finalizado el proceso de compra por parte de la víctima y realizada la transferencia bancaria, los compradores en ningún caso recibían los productos adquiridos.

Este hecho, sumado a la multitud de comentarios y reseñas negativas publicadas en la red sobre estos sitios, obligaba a las mismas a proceder a la reclamación del importe estafado, no consiguiendo ponerse en contacto con los responsables por regla general.